Metióse un mono en un trigal ya seco
del cañón de la mies a hacer flautillas
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,mil maravillas.
Con sus uñitas lo rasgaba astuto,
y soplándolo ansioso, procuraba
el hacerlo sonar, pero el cañuto
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,nunca sonaba.
Sin sacar de las cañas una avena,
haciendo de su afán cumplido alarde,
porfiado se mantuvo en su faena
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,toda una tarde.
Pero un tordo parlero, que su encono
había estado viendo, con gran flema
desde un sauce, le dijo: señor mono,
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,deje ese tema.
No desperdicie el tiempo en tal apuro,
las mieses trate Ud. con carantoñas,
¿No advierte, que ya está el alcacer duro
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,para zampoñas?
Nadie piense sacar provecho alguno
de aquellos, que pasaron con holganza,
el tiempo, conveniente y oportuno
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,de su crianza.
Lección / Moraleja:
Nadie piense sacar provecho alguno
de aquellos, que pasaron con holganza,
el tiempo, conveniente y oportuno
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,de su crianza.