Se encontraba una higuera a la orilla de un camino,
y una zorra vio junto a ella una serpiente dormida.
Envidiando aquel cuerpo tan largo, y pensando
en que podría igualarlo, se echó la zorra a tierra
al lado de la serpiente e intentó estirarse cuanto pudo.
Tanto esfuerzo hizo, hasta que al fin, por vanidosa, se reventó
Lección / Moraleja:
No imites a los más grandes, si aún no tienes las condiciones para hacerlo.