Cierta criada la casa barría
con una escoba muy puerca y muy vieja.
«Reniego yo de la escoba (decía):
con su basura y pedazos que deja
por donde pasa, (5)
aún más ensucia que limpia la casa.»
Los remendones, que escritos ajenos
corregir piensan acaso de errores,
suelen dejarlos diez veces más llenos...
Mas no haya miedo que de estos señores (10)
diga yo nada:
que se lo diga por mí la criada.
Lección / Moraleja:
Hay correctores de obras ajenas, que añaden más errores de los que
corrigen.