Añadir esta página a favoritos
¡
CATEGORÍAS


FABULAS > HUMILDAD, SENCILLEZ - ALTIVEZ,
LA CABRA Y EL CABALLO
(por Tomás de Iriarte)
Estábase una cabra muy atenta
largo rato escuchando
de un acorde violín el eco blando.
Los pies se le bailaban de contenta;
y a cierto jaco que también suspenso
casi olvidaba el pienso,
dirigió de esta suerte la palabra:
«¿No oyes de aquellas cuerdas la armonía?
Pues sabe que son tripas de una cabra
que fue en un tiempo compañera mía.
Confío ¡dicha grande! que algún día,
no menos dulces trinos
formarán mis sonoros intestinos.»
Volviose el buen rocín y respondiola:
«A fe que no resuenan esas cuerdas
sino porque las hieren con las cerdas
que sufrí me arrancasen de la cola.
Mi dolor me costó, pasé mi susto,
pero al fin tengo el gusto
de ver que lucimiento
debe a mi auxilio el músico instrumento.
Tú, que satisfacción igual esperas,
¿cuándo la gozarás? Después que mueras.»
Así, ni más ni menos, porque en vida
no ha conseguido ver obra aplaudida
algún mal escritor, al juicio apela
de la posteridad, y se consuela.


Lección / Moraleja:
Hay muchos escritores que se lisonjean fácilmente de lograr fama
póstuma, cuando no han podido merecerla en vida.
OTRAS FABULAS DE Tomás de Iriarte
Cuentos Infantiles, audiocuentos, nanas, y otros en CuentoCuentos.net © 2009 Contacta con nostrosAviso Legal

eXTReMe Tracker

La mayoría del material de CuentoCuentos.net es proporcionado por nuestros usuarios, proveniente del grandísimo almacén que es la red. Si considera que alguno del material expuesto vulnera sus derechos y/o prerrogativas, le rogamos que nos lo comunique contactando con nosotros